domingo, 17 de junio de 2012

Enamorada

Mi vida ha sido una verdadera montaña rusa en los últimos meses. Casi un año. Empecé por terminar lo que se esperaba de mí desde mi nacimiento, mi graduación de la universidad. Conseguí un trabajo que me gusta pero no me apasiona. Fui de viaje varias veces, conocí lugares que no conocía, hice cosas nuevas, me titulé y me enamoré.

Todas han sido de gran importancia, son cosas que yo esperaba de mí, que mis papás esperaban de mí. Pero la última me ha hecho una persona diferente, me ha transformado, soy una nueva yo. Soy alguien que yo no conocía, que me veo en el espejo con esa sonrisa de "tonta" y no me conozco, no me reconozco. Sin embargo, muevo mis manos, toco mi cara, y sorpresa, sigo siendo yo.

Soy sin duda alguna una persona que no expresa lo que piensa, ni lo que siente, más que en un blog anónimo... como este, pero esta vez fue diferente, porque aunque no expresé mucho, expresé mi amor.

Es una cosa extraña, sentir mariposas, es algo que ya me había sucedido, pero sentir que no tengo control, que no se quien soy, jamás. Siempre fui calculadora y siempre tenía como decimos "la sartén por el mango" controlaba las situaciones, era perfectamente consciente de la cadena de sucesos que sucedían después de hacer algo, esa especie de acción-reacción, haces, sucede.

Y esta vez, no tenía control de nada, había momentos en los que lo más parecido que se me ocurría era el movimiento de las olas en un mar enfurecido, en un momento estaba en la parte alta de la ola, viendo todo a mi alrededor, disfrutando y un instante después estaba bajo la sombra de enormes olas, que me amenazaban y me hacían sentir que me ahogaba.

Actualmente este oleaje no me ha dejado, me lleva y me trae, me mueve a su antojo, hay momentos en los que me doy cuenta a tiempo y brinco de una ola a la siguiente sin necesidad de estar en la parte más baja, pero ha sido un juego diario, un aprendizaje diario. No se puede controlar todo, pero si se puede saber que hacer en la siguiente ola para tragar menos agua.

He puesto a prueba lo que creía firmemente, me he conocido, me he dado cuenta de tantas cosas sobre mí de las que no estaba ni remotamente enterada... Ha sido un juego hermoso y al mismo tiempo doloroso. He caminado por lugares en los que nunca había estado y he descubierto que hay cosas, mismas de las que he escrito en este mismo blog, que tienen mucha razón, pero que no son cosas probadas, que no son reglas. Antes estaba tan segura de eso y era terminante con respecto a tantas cosas y he conocido la tolerancia y el entendimiento.

Estar enamorada, puede ser solo uno, pero cuando hay más es cuando se enriquece, cuando realmente aprendes. Es interesante saber que somos vulnerables, cuando se quiere a alguien eres vulnerable, empezando por el hecho de que tu lo quieres y que no puedes estar seguro que sea igual, eres vulnerable, porque te descubres como una nueva persona, entonces eres como un niño pequeño, que no sabe nada y está aprendiendo, pero no aprendes solo, aprendes con alguien más.

Odio la palabra depender, y odio también que se niegue, dependemos, claro que dependemos, de esa persona a la que se ama, se puede hacer y ser sin alguien más, pero una vez que se empieza a amar a alquien más, empieza a existir una dependencia, pero una dependencia voluntaria, en la que no se olvida de uno, sino que se piensa en alguien más y así es como se depende.

Es y ha sido una de las mejores experiencias, que super con mucho, mis logros académicos y profesionales. Y es algo que también me aterroriza, me da miedo, y que desconozco, pero es emocionante, excitante y enriquecedora.

No hay comentarios:

Publicar un comentario