¿Qué nos hace alejarnos de la gente? Pensando esto, me acordé de una persona que era muy querida, tenía muchos amigos, su familia lo admiraba y lo quería mucho un día empezó, como se hace con un pastel, a mezclar algunos ingredientes, sólo que en vez de terminar con un pastel, él se quedó sólo.
Comenzó con un poco de soberbia, el que se sentaba a su mesa no era “de su tamaño”, poco a poco esos escalones eran mayores. Después mezcló un poco de intolerancia, ahora no solo creía que los que lo rodeaban eran menos que él, sino que ya no soportaba estar en la misma mesa con esa gente a la que quería, porque no estaban a su nivel.
Lo siguiente fue dinero, empezó a tener más dinero del que estaba acostumbrado, entonces no era solo soberbia intelectual, sino ahora creía que él valía más ($$) que los que lo rodeaban. Con todo esto, lo lógico era un poco de egoísmo, que cada vez fue aumentando poco a poco, pero aumentando siempre linealmente. Dejó de pensar que los otros eran inferiores, ahora se limitó a no pensar en ellos para nada.
Se olvidó de todo. Se olvidó de quién era, porque tanto pensar en sí mismo hizo que su persona en su cabeza fuese otra que en la realidad. Y fue así como poco a poco, todo aquel que le rodeaba se empezó a alejar. Muchos durante mucho tiempo lucharon para hacerle ver que no era eso lo que valía la pena, ni por lo que valía vivir, pero no hizo caso.
El pastel terminó siendo un hombre que a los 55 años se quedó solo, su familia que lo quería y lo admiraba se fue yendo poco a poco, al principio regresaban, pero llegó el punto en que ya no volvieron. Sus amigos, los más valientes regresaron en algunas ocasiones, y hasta ellos al final se alejaron.
De los 55 hasta el día que murió, fue infeliz… lo más triste, es que esa mezcla de ingredientes solo tardó 10 años en hacerla, y los otros 45 en los que había hecho esas amistades y esa familia increíble, terminaron enterrados en el olvido.
Moraleja, es mejor ser tonto y pobre que ser listo y rico… si logras el equilibrio que afortunado eres, y esperemos que no te caigas de esa cuerda, que es muy delgada y muy larga, y que si te caes algún día no sea hacia el agujero negro, sino que sea al colchón que está del otro lado… que a fin de cuentas son la familia y los amigos… ellos te reciben con mucho gusto, aunque el golpe por la caída sea muy duro.
En un pastel una vez que mezclas los ingredientes y los cocinas, jamás volverán a ser los mismos ingredientes. Y un pastel mal hecho, jamas sabe bien. ¡¡Cuidado al momento de mezclar esos ingredientes!!
