domingo, 3 de marzo de 2013

Sueños

Desde hace años tengo un serio problema con los sueños. No suelo creer todo lo que se dice de los sueños "si sueñas que alguien se muere es que vivirá mucho", etc. Eso me parece superstición barata y tampoco creo en la parte Freudiana de los sueños.

Interpretarlos para todos, no creo que tenga sentido. Son un reflejo del subconsciente. Durante una época, era tanta mi obsesión por lo que soñaba, que algunas veces era capaz de "decidir" con quien soñar o qué soñar y me despertaba embriagada por mi sueño.

Pero también era un arma de doble filo, porque cuando algo me angustiaba, se colaba en mis sueños y me atormentaba y me despertaba con el estómago revuelto y nauseas.

Soñar que estás donde quieres y despertarte en un cuarto azul, en un país desconocido, y no en el lugar que quería, me provocaba nauseas y eventualmente vómito.

Soñar que me besas, y despertar sabiendo que es solo un sueño, tenía la misma reacción que el cuarto azul, pero más intensa. Soñar con gente desconocida con la que de repente estás comprometida, y soñar con accidentes de coche, y gente que te persigue es una aventura divertida.

Pero son mágicos los sueños, cuando no sabes qué te tiene tan emocionada, en los sueños lo ves, resumido y maximizado. Algo que te tiene angustiada, pasa igual y algo que quieres no volver a pensar, pasa igual. Es una magia fuerte, poderosa, blanca y negra.

Los sueños son el subconsciente que está al 100% y que te deja ver y conocerte. Es extraño sobre todo porque hay mucha gente que nunca sueña, y que no entienden la magia que existe, pero cuando sueñas y tienes un registro de los sueños, de repente te das cuenta que puedes tener tu propia novela cada noche con capítulos de todo tipo.

Tengo un "diario" de sueños, con paisajes coloridos, con historias tristes, con besos apasionados, con adioses melancólicos. Sueños con gente prohibida, con gente cercana, con gente desconocida, pero todos vividos con tanta intensidad que algunas veces puede asustar.

Alguna vez tendré un blog de mis sueños, en donde cuente todo aquello que pasa por mi subconsciente, sería como un desnudo absoluto de mi persona, que podría ser un experimento interesante. ¿No crees?


No hay comentarios:

Publicar un comentario